Observando el arranque de esta temporada liguera, con grandes sorpresas como la derrota del Real Madrid ante el levante, o el empate entre la Real Sociedad y el Barcelona, y entre que equipos como Málaga, Betis o Levante están por ahora que se salen, da la sensación de que esta Liga no va ser tan bipolar como fueron las de los dos años anteriores.
Sin embargo, no voy a ser hipócrita, estoy más que convencido de que finalmente, tarde o temprano, tan sólo habrá dos favoritos claros para llevarse el título liguero, como son Madrid y Barça, aunque no descarto que hubiera algo menos de diferencia entre el hipotético segundo en la clasificación y el hipotético tercero que la temporada pasada.
Recordemos que es imposible conseguir siempre los tres puntos en todos y cada uno de los partidos de la temporada, por lo que para mí, esto no significa que la liga vaya estar mucho más igualada. Unos pinchazos no justifican nada: recordemos que el Barcelona cayó el año pasado contra el Hércules, un recién ascendido y al final la Liga acabó como acabó; esta temporada, tras el contundente 5-0 al Villarreal (uno de los 5 mejores de la liga en los últimos años) el Barça pinchó ante la Real, para luego aparecer goleando a un pobre Osasuna que pagó el enfado del Barcelona por su ‘minicrisis’ y ni que decir tiene la goleada de escándalo al Atlético de Madrid, que venía de golear, dispuesto a dar mucha caña en esta Liga.
Por su parte, la situación del Real Madrid no era idéntica, pero era similar, dos pinchazos, dos goleadas, y un partido donde no hubo una goleada abultada, y hubo momentos de claro dominio merengue, aunque también de sufrimiento.
